Lo que parecía el infierno, terminó trocándose por cielo, por oxigeno. El negativo empate en Comodoro Rivadavia ante la Comisión de Actividades Infantiles a las cinco de la tarde, tras la magra performance de Quilmes ante la CAI, se invirtió allá por las doce la noche cuando la gente de Radio Impacto, en duplex por FM SUR 88.9 cantó que Gimnasia le había dado vuelta el partido a Instituto. Sí, aguante Gimnasia de Jujuy… De la nada a la gloria me voy, así me das más, rezaba Solari en épocas de bellas y crípticas melodías cuando Los Redondos tenían vida. Y ese Quilmes que ahora le saca 4 unidades a su inmediato perseguidor, Instituto, y cinco, al nuevo integrante del G4, All Boys, pisó Aeroparque con mucho más oxigeno y menos viento. El viento se llevó el fútbol pero dejó un punto para que las matemáticas le otorguen chances de meter festejo el próximo martes Quilmes se enfrente a Ferro. Paradojas del fútbol, Bianco, padre y mentor de la criatura, será juez y parte en la cuestión. Cobrará un porcentual del premio de ascenso por las primeras 19 fechas y podrá decidir si su ex equipo, puede festejar.
Mientras tanto, el plantel se entrenó por la mañana en el Centenario. Se realizaron ejercicios regenerativos y los que no jugaron hicieron fútbol. Mañana volverán a entrenarse en el estadio y a la noche quedarán concentrados en el Hotel Crillón de Capital Federal. El lunes seguramente será el turno de la práctica táctica y por la noche seguirán con la concentración aunque dormirán en la Villa Centenario a la espera del partido ante Ferro, el martes a las nueve de la noche.
