Ardiente paciencia

Todavía no pasa. No lo digerimos. La acidez nos está matando después de lo que nos comimos y se avivan las llamas en el pecho. Quema tanto la bronca en el interior que a alguno ya se le plantó un lagrimón. Pero que no cunda el pánico muchachos y muchachas, que para la semana que viene, Don Hugo vuelve con unos antiácidos excelentes. Y basta de dolor, y basta de sufrir porque ya es hora de festejar. Y qué mejor que reventar algún Globo para eso. Tengamos confianza… ¿O estaré siendo muy optimista?

Es complicadísimo apartarse del exitismo y del panquequismo en estos casos. Sobre todo cuando desde esta misma columna defendimos la idea de este equipo. Porque es verdad, íbamos por el buen camino, pero agarramos un pozo y dejamos el tren delantero, el carter, las llantas y la suspensión. Quilmes no hizo una bien. Fueron 90 minutos de picana constante. Extrañamos horrores a Jota Morales (es detestable la cultura del “yo te avise”, pero también dijimos que preocupaba la dependencia de nuestro goleador), la mitad de la cancha todavía esta dando vueltas en la nada y nos olvidamos de llevar defensores a Victoria. ¿La buena? La reivindicación total del ídolo, quien aún comiéndose tres pepas fue la figura del Cervecero. Trípodi, te bancamos.

Es urgente que el DT ponga más delanteros. Cuando ingresaron Diego Torres y Narvay, Quilmes por lo menos nos hizo ilusionar. Por supuesto que Tigre escondió las garras y se refugió para aguantar el resultado en ese momento, pero ¿qué podemos perder? Si igual con el plan de un único punta nos comimos tres y no generamos ni una situación de riesgo. Y vale recordar que jugamos contra un equipo que estaba para el KO, con el vendehumo de Caruso a punto de caerse en la chimenea.

Pero ya vimos todas las malas que teníamos que ver el sábado, no vale la pena seguir revolviendo el dedo en la yaga. Como decía Sabina, tomemos una pastillita para no soñar, y tratemos de arrancar el lunes con el pie derecho. Con nuestro mejor traje optimista. Aunque el reloj sigue corriendo, todavía no ganamos y cada vez nos vemos más abajo en la tabla. Arde la paciencia y la excusa de que el equipo se está conociendo (válida en las primeras fechas) en cualquier momento se incendia. Apurate Hugo, que queremos festejar.

Sebastián Diaz
Periodista de Diario Olé, exclusivo para Pasión Cervecera

Fotos de Silvana Livigna

Fotos de Diego De Vicentis

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