Sale el sol. Después de tanta noche, sale el sol. Tímido, con algunas nubes que lo opacan parece asomar. De a poco Quilmes ve la luz. Y vuelve la ilusión. ¿Qué locura no? Aunque todos nos hayan dado y nos den por descendidos, nosotros todavía creemos que falta mucho, que se puede. De uno o dos partidos para el otro, vimos potencial en este equipo. Madelón nos va iluminando, con la actitud de los pibes a la cabeza.
Y para el pueblo, lo que es del pueblo. Evidentemente no estaban equivocados los más de 20.000 hinchas de Quilmes que pedíamos que jueguen los chicos y los artífices del ascenso. La cosa va mejorando en base a la actitud que le impusieron en la mitad de la cancha Garnier, Kalinski y Cerro. Se puede jugar relativamente bien como ante Racing, mal como contra Gimnasia, pero los testículos están ahí y eso es lo que vale. A partir de esa premisa nació un futuro en el Cervecero y esperemos que no se acabe.
Los frutos están a la vista. Cerrito de a poco le fue agarrando la mano a una posición que no es la de él y contra Albiceleste estuvo a nada, a escasos 5 centímetros de ser héroe. Pero el destino no quiso que la noche sea perfecta y habrá que conformarse con su primer gol en Primera, que no es poco. No recuerdo cuando fue la última vez que salió de la cantera un chico con tanta proyección y el hecho de que se afiance es un notición para Quilmes, sea cual sea el final que le depare al club.
Ya que estamos mimosos vamos a seguir repartiendo flores. A Leonardo Carol por inculcar una mentalidad agresiva y levantar anímicamente un plantel que estaba por el 9 en la cuenta para el KO. También por lograr un buen PT de Raymonda y sacarle el jugo a Caneo, el asistidor, en el ST. Merece titularidad, es cierto, pero hasta acá no nos está yendo mal con ese planteo. A Kalinski por dejar todo y ser un buen primer pase en los inicios de las jugadas (fue el que armó, junto al Japonés la del gol), a Garnier, otro que no se guarda nada y a una defensa que aparenta estar más sólida, desgracia de Fontanini aparte (una lástima, estaba haciendo un buen partido el ex Rafaela).
En el tintero, los otros cambios. Basta de Varela. Basta, por favor. Hirsig no convence. Es preferible seguir probando con los pibes que mal no les va en Reserva. Después no encontré muchos más defectos notorios. Si varias cosas para laburar, pero así volvimos a estar en el buen camino. Esperemos poder seguir ante All Boys. Hay que ganarles como sea, es clave. Qué lindo es volver a la cancha con la incertidumbre de que puede pasar cualquier cosa. Se puede perder, pero también hay chances ciertas de ganar y eso es algo que no sentía desde hace vaaaarias largas fechas. En el Sur, amanece, que no es poco.
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Fotos exclusivas de Silvana Livigna para PasionCervecera.com