Viene y va la esperanza. Y cómo se sufre. Claro, esto es Quilmes ¿qué pretendían? Pero qué lindo es. Ser del Cervecero te hace guapo a la fuerza. No queda otra. Sacar pecho en las difíciles, agrandarte cuando la cosa pinta fea… eso son estos colores. Pura adrenalina, testículos de hierro en todo momento, comerse mil cachetazos y levantarse. Así resurgimos este campeonato. Como hinchas de Quilmes.
Y como hinchas de Quilmes jugaron los jugadores. Ya hace varias fechas que venimos diciendo que es otra la actitud. Pero contra San Lorenzo… ¡Qué ganas, carajo! Todo el tiempo presionando, metiendo, trabando. Por cada jugador Cuervo, había tres o cuatro del Cervecero hambrientos, con los ojos encolerizados y mostrando los colmillos. Hasta Varela demostró compromiso. Esta vez muchachos, sentí mucho orgullo por ustedes.
No los dejamos jugar. Les robamos la pelota en todo momento y tuvimos un circuito de toque bastante lúcido. Así, lo único que pudieron morder los de San Lorenzo es el hombro de Raymonda. Pero lo más destacable es la idea de Madelón, que no sólo genera identificación en los que lo vemos de afuera, si no también da resultados. Por eso, Jota y Dieguito Torres o Varela son los primeros defensores. Por eso, Garnier y Kalinski se ganaron la titularidad, porque son la representación justa de lo que quiere el DT. Y con ese estilo, es posible soñar.
Por otra parte, que buena noticia es lo de Morales. Que haya jugado el partido que jugó, que las ganas que pone tengan su recompensa y que se le haya abierto el arco, es un alivio. El hecho de que Migliore se haya comido el gol y que haya errado el penal, es una anécdota a esta altura. Lo importante es que Jota agarre confianza porque es fundamental para este equipo.
Ahora toca Olimpo, partido clave por donde se lo mire. Lo bueno es que el técnico conoce las mañas de esa cancha de metegol. Si se la sabe inculcar a los jugadores, hay motivos para decir que vamos a estar más cerca de la Promo que del descenso. Qué siga la Jota, Quilmes. Quedarse en Primera, es posible.