Falta un montón. Faltan 25 fechas. 75 puntos en juego. Quilmes está a 6 de la punta y a 3 de la promoción. Hay tiempo para todo, no hay que desesperar, sólo se perdió un partido… en fin. La historia cassettera, que no por cierta deja de serlo. Pasaron varios días de la derrota de local contra Desamparados de San Juan (ya eso solo, dicho así, es para agarrarse la cabeza), y no puedo terminar de entender mucho de lo que pasó.
El error está ahí, en ser peyorativo. En creer que porque un club no tiene chapa ni historia, y porque se llama Desamparados, va a venir a colgarse del travesaño. Eso es necedad, es no darse cuenta de que el fútbol cambió. Porque pasa esto. Viene ese equipo al que vos subestimaste con un planteo livianito y casi sin pensarlo. Y viene, incluso con tres lesionados, y te pega un toqueteo bárbaro.
Y me pregunto por qué Quilmes no puede proponer eso. Por qué no puede intentar dar dos pases seguidos en función ofensiva, por qué no pasa un minuto sin tirar un pelotazo frontal. Por qué no tiene variantes, por qué nunca rompe la línea de 4 en el fondo. Por qué sigue regalando el mediocampo a costa de tener un número 5 que quiere jugar de 8, de 7 y de 10 a la vez, pero nunca de 5… mientras en el banco espera el único que entendió que la pelotita puede ir por el piso y hay que dársela a los que están vestidos como él.
Lo que intentó Desamparados es, mínimamente, lo que uno espera de Quilmes. Y no por principio estético, sino porque es mucho más fácil lastimar al rival intentando asociarse y jugando por abajo que con constantes pelotazos del 2 al 9. Y cuanto más cerca estén el 2 y el 9, mejor. Acá los separan 80 metros.
Muchísimas preguntas. De las futbolísticas y de las otras, que prefiero no detallar por vergüenza propia y ajena. Y como siempre trato de analizar sin mirar el resultado, digo que Quilmes, en lo que va del campeonato, ha rendido por debajo de lo esperado. Para salir del mal momento, las recetas son miles, ninguna mágica. Yo prefiero esta. La que, soberbia aparte, nos vino a mostrar un equipo recién ascendido.
Fotos de Silvana Livigna para Pasión Cervecera
El máquina Giampietri en la platea. Muy buena foto nos acerca Silvana Livigna