Partió desde la tercera posición en la última fecha y nadie daba un mango por el ascensodirecto de Quilmes. Pero el equipo de Omar de Felippe, calladito, viajó a Puerto Madryn para enfrentar a Guillermo Brown con la esperanza de ganar y esperar resultados. Y así fue. Tripodi; Mandarino, Carli, Sebastián Martínez, Corvalán; Garnier, Rimoldi, Mansilla; Caneo; Rescaldani y Cauteruccio fueron los once que salieron a la cancha desde el primer minuto con hambre de gloria.
Arrinconó al rival, de cara al arco donde se ubicaban los miles de fieles cerveceros que no tuvieron drama en emprender los más de 1300 kilómetros de distancia, y logró abrir el marcador de la mano del goleador Martín Cauteruccio, que en cinco minutos hizo dos goles (entre los 18’ y los 23’) y selló el 0-2 como el resultado final para el delirio de todos los hinchas de Quilmes, que disfrutaban el retorno a Primera División. En el medio, claro, hubo que esperar los resultados de los rivales directos, pero tanto Instituto como Rosario Central perdieron sus partidos y el Decano, en segunda posición por debajo de River, lograba la vuelta a la máxima categoría con 72 puntos.
Los jugadores supieron dejar atrás la sorpresiva salida del DT Caruso Lombardi a San Lorenzo, a once fechas del final del campeonato, y con la llegada de Omar de Felippe cosecharon seis victorias y dos empates, gracias al buen funcionamiento colectivo, la magia de Miguel Caneo y los goles de Martín Cauteruccio y Ezequiel Rescaldani.
El festejo fue inolvidable. Desde los que viajaron a Puerto Madryn hasta los hinchas que esperaron la llegada de los jugadores a Aeroparque y luego fueron en caravana por la autopista Buenos Aires-La Plata hacia el Estadio Centenario, ya en plena noche del sábado 22 de junio de 2012. Un día difícil de olvidar.
QUE GRANDE, LA VERDAD QUE FUE UNA LOCURA,
FUE EL CAMPEONATO MAS DIFICIL DE LA HISTORIA DEL NACIONAL B, Y CON RIVER NADA MENOS.
SALUDO A LOS MUCHACHOS QUE NOS DIERON ESTA TREMENDA ALEGRIA,
Excelente nota y recuerdo, que lindo equipo, mas allá de los ricos planteles que tanto Instituto, Central, River, tenían, siempre estos recuerdos que tanto reconfortan, te hacen comparar lo que hoy tenemos, pero buen, ya estamos acostumbrados a perder jugadores que ganaron mucho, me refiero a lo futbolistico y despues los vemos dispersos en otros equipos sin relevancia, salvo Caute. Abrazo y repito, muy buena nota GASTON.