Empate en el cierre

DECIMONOVENA FECHA – NACIONAL B 2007/2008

Unión 1 1

Quilmes

  Luis Aseff
Renzo Vera
Ignacio Canuto
Marcelo Mosset
Walter Yacob
Fernando Fontana
Leandro Sartor
Martín Zapata
Jorge Torres
Marcos Flores
Leandro Zárate
   

Marcelo Pontiroli
Alfredo González Bordón
Walter García
Hector Sosa
Diego Sequeira
Jorge Medina
Esteban García
Ezequiel Schmidt
Adrián Giampietri
Germán Alemanno
Diego Ceballos

 
Goles:PT: 20´ Zarate (U) 46´ Vidal Sosa (Q)
Amonestados:Sartor y Zapata (U), González Bordón (Q)
Cambios:PT: 23′ Yacob X Torres (U), ST: 16′ Rodriguez X Alemanno (Q), 22′ Musto X Sequeira, 25′ Pereyra X Flores, 29′ Olivares X Giampietri
Arbitro:Alejandro Toia
Estadio:15 de Abril

En el último partido del año, Quilmes igualó 1-1 ante Unión, en Santa Fe. El gol lo convirtió Héctor Vidal Sosa en el final del primer tiempo. Destacada actuación de Walter García.

La primera parte de la temporada llegó a su fin. El Cervecero se llevó un punto de la Provincia de Santa Fe y termina este 2007 como uno de los mejores equipos de la categoría. Fue 1-1 ante Unión para cerrar una segunda mitad del año que renovó las ilusiones de volver a Primera. El encuentro fue discreto y mal jugado, pero con numerosas situaciones de riesgo en ambos arcos.
Los primeros instantes del partido fueron sumamente dinámicos, porque ambos equipos manejaban la pelota rápido, volcando la mayoría de los ataques hacia las bandas. Quilmes apostaba al manejo de Giampietri y las subidas de Schmidt y Sequeira para crear peligro. Por su parte, Unión intentaba sacar provecho del hueco que los carrileros del conjunto visitante dejaban cuando pasaban al ataque. A través de ese recurso, el local comenzó a hacerse más fuerte.

Después de varios minutos de ida y vuelta, el Cervecero terminó replegándose en su campo a causa del juego asociado de los santafesinos, que si bien no lograban inquietar a Pontiroli esbozaban numerosos intentos de buenas jugadas. En una de las tantas apariciones de Torres por izquierda llegó el primer grito de la noche. El volante de Unión se apoderó de la pelota, llegó hasta el fondo, dio algunos rodeos y sacó un perfecto centro, que Leandro Zárate conectó de cabeza ante la siesta de los defensores. Apenas unos momentos después de sacar del medio, el equipo de Fanesi tuvo el empate en los pies de Ceballos, pero el delantero no supo cómo mandar a la red una pelota que le había quedado después de un error en la última línea tatengue.

La desventaja en el marcador obligaba a Quilmes a salir del fondo, aunque cada vez se le hacía más complicado hilvanar una jugada que lo acerque al arco rival. Con el local conforme por la diferencia conseguida y el visitante carente de imaginación, el partido entró en un pozo. La pelota volaba de un lado a otro sin que nadie pudiera manejarla correctamente. El encuentro se tornaba discreto y el Cervecero desaparecía del campo al tiempo que su dupla de volantes centrales no podía hacer pie. Medina erraba todos los pases y llegaba tarde a la marca, mientras que Esteban García no gravitaba en ataque ni aportaba en defensa. Las pocas intervenciones que hasta allí habían tenido los arqueros pasaron a ser sólo un recuerdo cuando todo lo que se veía en la cancha era desorden.

Cuando el cronómetro se acercaba a los minutos finales del primer tiempo, el partido cambió de rumbo. Empujado hacia delante por el adelantamiento de sus jugadores en el campo y atraído por la licencia para atacar que se tomaba su rival, Quilmes llevó la pelota bien cerca del área de Assef, territorio casi desconocido hasta ese momento. Aunque sin mucha eficacia, el Cervecero acorraló a Unión y consiguió su recompensa cuando el tiempo reglamentario ya se había cumplido. Un tiro de esquina desde la derecha, que Ceballos bajó de cabeza terminó en gol de Vidal Sosa. Final de la primera etapa y una igualdad tranquilizadora.

El comienzo del segundo tiempo encontró a los equipos con sus roles invertidos, porque era Quilmes quien manejaba la pelota con tranquilidad mientras que Unión se desesperaba y cometía numerosos errores. Pese a la situación favorable, la figura de Giampietri se fue diluyendo, las proyecciones de Sequeira ya no fueron tan constantes y Schmidt, de buen comienzo, ya casi no contribuía. De esta forma, el Cervecero dejó pasar la oportunidad de golpear de nuevo y el partido volvió a caerse.

Si bien ambos equipos se encontraron con varias situaciones de gol, todas ellas fueron producto de los errores defensivos que ofrecían los defensores de ambos equipos. En un panorama bastante discreto de mitad de cancha hacia atrás, siempre sobresalió la imponente figura de Walter García, quien terminaría siendo el mejor de la noche a fuerza de quites, entrega y firmeza.

Las entradas de Olivares y Luciano Rodríguez podían aportarle a los de Fanesi la velocidad y el vértigo que tanto hacían falta, aunque ninguno de los dos pudo entrar en sintonía con Ceballos, quien realizó un gran despliegue fuera del área. El mediocampo continuó desaparecido y el ingreso de Musto sobre el sector derecho terminó disminuyendo las posibilidades de profundizar los ataques cerca de la raya.

En el balance, el empate terminó siendo justo. Los dos conjuntos estaban en condiciones de llevarse el triunfo y ninguno se dio por vencido hasta que el reloj se detuvo. Quedó la sensación de que con un poco más de audacia Quilmes podría haber obtenido una gran victoria, pero ya no había tiempo para más. El desenlace del partido puso punto final al 2007 para el Cervecero. Ahora el plantel deberá trabajar de cara al semestre decisivo de esta temporada, porque los sueños de volver a Primera son los que alimentan a todos los hinchas.

Ariel Caparelli

Comments are closed.