Los mismos de siempre

Ojalá estas palabras me inspiren tanto como lo hace La Renga. Ojalá estas palabras no estén acompañadas en los últimos tiempos por un combo interminable de puteadas. No entiendo, no me entra en la cabeza. Ver como pasan los fines de semana y nada cambia. Yo sé que son solamente tres fechas las que van, pero el tiempo no para y cada día me veo más jugando de nuevo con Aldosivi.

¿Adónde vas Quilmes? ¿Qué buscas? Por favor que alguien me explique cuál es la idea de este equipo. Demasiado prediscible, demasiado intrascendente, no trasmite nada. Por eso prácticamente no le podemos hacer goles a nadie y terminamos sufriendo porque ya ni solidez defensiva tenemos. Ni chicha, ni limonada, así nos vamos seguro…

Ojo, sigo siendo optimista. Quizás hasta un crédulo inocente pensando que aún se puede. Algunos cambios fueron positivos, como los de Cauteruccio, Romeo y Broggi. Pero obviamente se nota la falta de funcionamiento y una conexión entre los de arriba y el resto (como vamos a extrañar a Caneo…).

Pero si de variantes hablamos, que alguien (cualquiera, Madelón, Meiszner o él mismo) me explique como puede Varela seguir jugando… DE TITULAR. Y encima cumplir los 90 minutos. No hay forma de que lo comprenda, no en este mundo. El clamor popular a veces tiene razón y en este caso, no quedan dudas. Como también que merecen oportunidades jugadores como el Pitu González, Narvay y los pibes que parecen tener un plus al sentir la camiseta.

Después hay que admitir que jugamos contra un equipo que se reforzó muy bien y que de mitad de cancha para adelante son de lo mejor del torneo, con Regueiro, Valeri y Camoranesi. Pero en este fútbol que cualquiera le puede ganar a cualquiera, y teniendo en cuenta que por nombres Lanús es mejor, nosotros somos los únicos que cumplimos con la lógica.

Siento que soy repetitivo en mis comentarios. Pido perdón por eso, pero espero que también se entienda que es repetitivo lo que nos pasa los fines de semana. Así vamos a seguir, si somos los mismos de siempre…

PD: Los mismos de siempre también están en la tribuna, en esa multitud que copó una vez más de visitante. Ellos merecen mucho más.

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