No sin sufrir, Quilmes le ganó a Tigre por 1 a 0 y sumó tres puntos importantísimos. ¿Para qué? No sé, después nos fijamos. Sirve y mucho conseguir un triunfo como visitante, materia que había costado considerablemente. Enfrente, un rival directo por la permanencia y un clima final en Victoria que nada tuvo que envidiarle al de un equipo que se va al descenso. Y la tranquilidad de verse encaramado en los primeros puestos, cerquita de la punta, aunque el torneo recién amanezca.
¿Ganó bien Quilmes? Sin duda. En todo momento impuso las condiciones del cotejo, aun cuando no tuvo la pelota. De hecho, la posesión total favoreció al equipo de Cagna, pero el Cervecero siempre se mostró mucho más capaz de lastimar. Y hasta se puede creer que darle la pelota a Tigre en el segundo tiempo estuvo planificado, dado que el Matador nunca supo qué hacer con ella. Faltó, sí, la otra parte del plan: algún contragolpe certero que nunca llegó.
La aparición del Chapu Braña es otro aspecto a celebrar. Con sólo 45 minutos -algo previamente acordado- demostró que con 34 años todavía puede darle al equipo un salto de calidad que le falta hace tiempo en la zona de contención. Benítez, por su lado, jugó su mejor partido desde la vuelta, haciendo un trabajo sucio que pocos imaginaban. Todavía es uno de los aspectos clave a mejorar en el funcionamiento del equipo, pero está encaminado y quedó claro el sábado.
Dentro del contexto que dice que van cinco fechas, que falta un montón, que hay que mejorar otro tanto, Quilmes de a poco va resolviendo el problema que más nos preocupaba a todos: transformar la tenencia de pelota en peligro. Durante muchos lapsos en los últimos dos partidos, cada vez que el equipo cruzó la mitad de la cancha terminó la jugada abajo del arco. Boghossian mejora, los extremos son tales y Caneo cada vez que la toca se muestra más que vigente.
No es más que un arranque, pero es un arranque auspicioso. Los números cierran, el equipo en líneas generales funciona y muestra que puede seguir en ese camino. Habrá tiempo para fijar objetivos, viene Arsenal y el equipo tiene la chance de engrosar el promedio y de subirse a la punta del torneo al mismo tiempo. Lindos dilemas que a todos nos gusta tener mientras se siga sumando en consecuencia.
Fotos de Alberto Hougham para PasiónCervecera.
Fotos de Silvana Livigna para PasiónCervecera.
