No es noticia que este plantel, al que le toca defender la blaquita en el torneo de transición, es un equipo por demás austero en lo económico y deportivo. Tampoco es novedad que sea así por la desastrosa situación económica que vive el club. Al terminar el partido contra Lanús la paciencia de la gente tocó fondo y explotó en insultos, pero no para el equipo, sino para la dirigencia.
Una vez más el Cervecero fue derrotado en su propia casa. Tuvo un buen comienzo de partido donde jugó de igual a igual contra un equipo superior en lo deportivo. Sin los centrales, sin Braña y sin Sarmiento, pero con el Pitu Gonzalez y Klusener, el Cervecero se las ideaba para contener los ataques Granates y generar algo de peligro. Cerca del final del primer tiempo una pelota buscó la mano de Suárez en el área y Pitana cobró un penal dudoso que luego Romero transformo en gol. Sólo una jugada después, y por esas desgracias que el fútbol también tiene, uno de los chicos que quizá merecía otro debut, luego de un rebote en Dulcich, tocó la pelota y se metió en el arco dejando el marcador 0-2. A partir de ese momento el Cervecero desapareció del campo de juego. Apenas intentaba que Lanús no aumentara el marcador. Y si esto no ocurrió fue por la mala puntería de Silva a la hora de definir.
El partido terminó, y para perder la paciencia, la parcialidad cervecera esperó a que los jugadores estuvieran en el vestuario. Esta reacción me provocó una gran alegría, ya que fueron varios los partidos en los que se la terminaban agarrando con estos chicos que estaban poniendo la cara cuando les tocaba jugar. Claramente está cayendo la ficha de que los que pisan el campo de juego no son para nada los responsables. Del lado dirigencial se habla de que este es el camino para salir de la crisis económica, pero nada dicen acerca de que esta crisis fue generada por ellos mismos.
Una vez que el equipo llegó al vestuario la tribuna explotó contra los dirigentes en general, nombrando específicamente a Meiszner y Anibal Fernandez como los responsables. Quizá sea el momento de que se termine de una vez los cuentos de son ¨los que traen la platita¨ o ¨los que se cargan la vaca al hombro¨.
hay que alentar a estos jugadores a muerte. cambiar el nombre al estadio y a la hora de votar pensemos.
son nefastos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
son nefastos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Clubes pobres! Dirigentes ricos!,,,
Tan o mas corruptos que los que dirigen el pais
La mafia va por todo
Verdaderamente me provoca mucho dolor ver el estado de las cosas.Dirigentes cronicos ,soberbios y los empleados no cobran,los socios pagando cuota de clubes de primer mundo,juicios por todos lados.un desastre.!!Tengamos memoria a la hora de votar,y apoyemos al tecnico y a los jugadores que dan la cara y Dios sabra cuando van a cobrar.Memoria!!
¿Saben una cosa muchachos? Tengo una sensación de vergüenza y bronca para dar una opinión en este artículo. Me remito a lo que dijo no hace mucho el Chapu Braña: Sí, yo puedo bajar mis pretensiones económicas, pero aún así, se verá en el diario vivir del Club las falencias económicas. Empleados, vestuarios, pago de sueldos y muchos fallas más que tenemos que vivir… (Clarito, no…) Pero la CD no va a renunciar. Como la democracia indica, esperaran las próximas elecciones. ¡Ese es el momento…!
Lo fundieron, eso es lo que hicieron por el club
ahora no hay mas plata para nada,
y si quieren ser serios, no vamos a tener presupuesto por mucho tiempo